La ansiedad patológica o enfermiza
Que diferencia una de otra

Lo que más nos interesa es desarrollar la llamada ansiedad patológica o enfermiza, que es la que nos ocupa en este material y la que queremos enseñar a prevenir. Este tipo de ansiedad está constituida por un conjunto de síntomas que la psiquiatría, para la denominación diagnóstica, interpreta como trastornos de ansiedad. Se caracteriza por un aumento en la intensidad de la angustia y por una mayor durabilidad de esta en relación con el episodio que la desencadena.
Por ejemplo:
Dentro de ocho meses me caso, pero no puedo parar de pensar en ese día,
tengo mucho miedo de que las cosas no salgan bien.
No puedo dormir, todo me irrita, todo me exaspera.
No aguanto más esta angustia… ¿Me puede dar algo para tranquilizarme?.
Hemos explicado en el libro Aprender a sentir que nuestras valoraciones y creencias son las que producen nuestras emociones. De acuerdo con lo que pensemos o creamos de algo, esto generará emociones buenas o malas. Por lo tanto, podemos deducir que también la ansiedad se corresponde con la manera de creer o pensar que nosotros tenemos de la realidad.
Desde el punto de vista de la terapia cognitiva —según Aaron Beck, uno de los fundadores de dicho modelo psíquico—, la ansiedad se caracteriza porque la persona que la sufre tiene la siguiente tríada de creencias que pueden ser conscientes o inconscientes, pero que siempre están.
1. Visión del futuro como incierto. El sujeto vive lo que cree que le ocurrirá en el futuro de forma anticipada. Interpreta
los acontecimientos que vivirá como peligrosos o desagradables, como amenazas físicas o sociales para él mismo. Por ejemplo: “Si no puedo depositar este cheque a tiempo, me cerrarán la cuenta… ¿Qué hago si me cierran la cuenta? ¡Dios mío! ¡¿Qué hago?! ¡Nadie más me va a dar crédito! ¡Maldición!!.. ¡¡Tengo que depositar este cheque!!”.
2. Visión del entorno como peligroso. Sumado a la creencia o interpretación anterior, el individuo considera que todo lo que ocurre a su alrededor puede perjudicarlo, por lo cual extrema las medidas de prevención para que nadie ni nada interrumpa su calidad de vida. Por ejemplo: Él tenía que depositar ese cheque. En el trayecto, insultaba a cada vehículo que le cerraba el paso. Todos los que se le cruzaban en el camino eran peligrosos para él, por lo cual los trataba violentamente.
3. Visión de uno mismo como carente de capacidad o de recursos para superar esos peligros. En la ansiedad, no solo se interpreta que algo malo puede ocurrir, sino que esta creencia se asienta en la interpretación de que uno no es capaz de resolver el problema o peligro que se viene. Por ejemplo: Él pensaba que si no depositaba ese cheque, perdería muchas posibilidades de crédito. Eso lo dejaría en un estado de posible quiebre económico y no se sentía capaz de solucionar ese problema.
Continuará en próximo artículo…